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Una valiosa información proporcionada por el medio de comunicación alternativo catalán La Directa, honesto disidente de «paraísos capitalistas», entre los que descuella la «democracia» hispano-europea.

El miércoles 17 de julio las víctimas de disparos con balas de goma Carles Guillot y Ester Quintana daba una rueda de prensa junto con el abogado Jaume Asens para anunciar la demanda que interpondrán contra el Estado español ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (en el ámbito del Consejo de Europa, no de la Unión Europea) por el uso de balas de goma. La demanda parte de las asociaciones Stop Balas de Goma y Ojo con tu ojo.

Durante la rueda de prensa Guillot declaró que el objetivo de esta demanda es «visibilizar la falta de justicia» además de «la ineficacia y la irresponsabilidad de una clase política que defiende y ampara a los policías».

El miércoles se cumplían 12 años desde que Guillot fue alcanzado por un proyectil durante el desalojo de un centro social okupado en el barcelonés barrio de Gracia. Este caso que fue archivado por la Audiencia Provincial de Barcelona. Para sufragar los gastos de esta demanda se ha abierto una campaña de crowdfunding hasta el 13 de agosto, la cual está a punto de llegar a lograr el mínimo de dinero necesario.

Los hechos que se denuncian ocurrieron el 17 de julio de 2001 en la calle Sant Josep de la Montaña del barrio de la Salud de Barcelona. Un gran operativo del Grupo 2 de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la policía española desalojaba la casa Can Nyoki, justo ante la emblemática Kasa de la Montanya, okupada desde 1989. El pelotón policial, dirigido por el inspector Silverio Blanco, decidió después de recibir la autorización de la Delegada del Gobierno español, Julia García-Valdecasas, asaltar la Kasa de la Montanya con la justificación que desde el edificio se habían lanzado objetos a los agentes, a pesar de no había ninguna orden judicial de desalojo.

Los enfrentamientos se extendieron por todo el barrio y uno de los numerosos disparos con balas de goma impactó al ojo de Carles Guillot, provocándole la oclusión del globo ocular y gran número de fracturas óseas de lenta recuperación. Ha sido intervenido quirúrgicamente varias veces y ahora lleva una prótesis ocular. De aquel operativo se derivaron dos investigaciones judiciales: una por las lesiones a Guillot, que fue archivada por la Audiencia Provincial de Barcelona, y otra por robo y desalojo ilegal de la Kasa de la Montaña, que el juzgado de instrucción 28 de Barcelona también archivó.